Aprender cantando: velocidad lectora

Hoy hemos hecho una actividad muy divertida: 

De manera individual (las tres primeras veces) y luego por grupos, hemos tenido que hacer un "dictado canción". ¿Sabéis lo que es eso? 

Consiste en que la tutora nos reparte un folio donde viene escrita una canción, pero tiene huecos en blanco que hay que completar con las palabras que oigamos en la canción y que son las que faltan. Para ello nos dio tres oportunidades: la primera era simplemente escuchar, la segunda ya teníamos que coger el lápiz y completar los huecos y en la tercera ronda era o bien para completar o bien para comprobar. 

Una vez en grupo, nos ayudamos los unos a los otros para conseguir tener la canción completa: ¡ese era el objetivo! Además de tener una velocidad leyendo considerable, más rápido de lo que normalmente leemos. El hecho de tener que seguir el ritmo de la música, te marca una velocidad que no puedes omitir. 

Cuando hemos acabado de hacer las dos canciones siguiendo el mismo proceso, hemos hinchado nuestros pulmones de aire y nos hemos ido a lo profundo del mar con La Sirenita o hemos podido respirar aire puro en la selva de Tarzán, dejándonos la voz cantando. ¡Ha sido increíble!